Aclaracion:
Bueno todos los personajes y los libros que leen pertenecen a la genialisima JK
Rowling ¿ok? yo solo lo traspaso a un blog para que puedan leerlo de una manera
diferente con las intervenciones de ciertos personajes pertenecientes a ella.
Espero
Disfruten, son un poco largos, pero en cada actualizacion subo un capitulo
entero.
Harry
Potter y la cámara de los secretos.
Capitulo XI:
"El club de duelo"
Al despertar Harry la
mañana del domingo, halló el dormitorio resplandeciente con la luz del sol de
invierno, y su brazo otra vez articulado, aunque muy rígido.
-pobrecito- dijo Lily con pena
Se sentó enseguida y
miró hacia la cama de Colin, pero estaba oculto tras las largas cortinas que el
propio Harry había corrido el día anterior. Al ver que se había despertado, la señora Pomfrey se acercó
afanosamente con la bandeja del desayuno,
-Es genial desayunar en la cama- dijo James
-Lo anotare mentalmente- le murmuro Lily sacándole una
sonrisa
y se puso a flexionarle y estirarle a Harry el
brazo y los dedos.
Varios hicieron una mueca
—Todo va bien —le
dijo, mientras él apuraba torpemente con su mano izquierda las gachas de
avena—. Cuando termines de comer, puedes irte.
Todos sonrieron
Harry se vistió lo
más deprisa que pudo y salió precipitadamente hacia la torre de Gryffindor,
deseoso de hablar con Ron y Hermione
-Chocolate por la noticia- murmuro Neville haciendo sonrojar
al trio
sobre Colín y Dobby, pero
no los encontró allí. Harry dejó de
buscarlos, preguntándose adónde podían haber ido y algo molesto de que no
parecieran interesados en saber si él había recuperado o no sus huesos.
-Estabamos haciendo otra cosa- dijo Ron
-¿Qué cosa?- dijo Fred alzando una ceja
-mira nuestro Ronnie, tan pequeño y haciendo cositas de
adultos
-¡ey!- dijo Hermione sonrojada
-oh vamos tenemos una hija y no la trajo la cigüeña-
reprocho Ron
Cuando pasó por
delante de la biblioteca, Percy Weasley precisamente salía de ella, y parecía
estar de mucho mejor humor que la última vez que lo habían encontrado.
Ginny rio y Percy se sonrojo
—¡Ah, hola, Harry!
—dijo—. Excelente jugada la de ayer, realmente excelente. Gryffindor acaba de
ponerse a la cabeza de la copa de las casas: ¡ganaste cincuenta puntos!
-¿Percy hablando de Quidditch?...-dijo Charlie divertido
-¿Papi de que hablan?- pregunto Molly jr.
-De nada pequeña- miro reprochante a su hermano
—¿No has visto a Ron
ni a Hermione? —preguntó Harry.
—No, no los he visto
—contestó Percy, dejando de sonreír—. Espero que Ron no esté otra vez en el
aseo de las chicas...
-Esa frase suena mal- comento Tonks pensativamente
Harry forzó una
sonrisa, siguió a Percy con la vista hasta que desapareció, y se fue derecho al
aseo de Myrtle la Llorona. No encontraba ningún motivo para que Ron y Hermione
estuvieran allí, pero después de asegurarse de que no merodeaban por el lugar
Filch ni ningún prefecto, abrió la puerta y oyó sus voces provenientes de un
retrete cerrado.
-Deberian haberse callado si no querían que los encuentren-
dijo Sirius
-En retrospectiva es bastante obvio que Sirius tiene razón-
agrego Harry
—Soy yo —dijo,
entrando en los lavabos y cerrando la puerta. Oyó un golpe metálico, luego otro
como de salpicadura y un grito ahogado, y vio a Hermione mirando por el agujero
de la cerradura.
Todos rieron
—¡Harry! —dijo ella—.
Vaya susto que nos has dado. Entra. ¿Cómo está tu brazo?
—Bien —dijo Harry,
metiéndose en el retrete. Habían puesto un caldero sobre la taza del inodoro, y
un crepitar que provenía de dentro le indicó que habían prendido un fuego bajo
el caldero. Prender fuegos transportables y sumergibles era la especialidad de
Hermione.
Varios sonrieron
-Hermione es brillante en todo- dijo Ron haciéndola sonreir
orgullosa
—Pensamos ir a verte,
pero decidimos comenzar a preparar la poción multijugos —le explicó Ron,
después de que Harry cerrara de nuevo la puerta del retrete. Hemos pensado que éste es el
lugar más seguro para guardarla.
-Considerando a Myrtle es la mejor opción- acepto Bill
Harry empezó a
contarles lo de Colin, pero Hermione lo interrumpió.
—Ya lo sabemos, oímos
a la profesora McGonagall hablar con el profesor Flitwick esta mañana. Por eso
pensamos que era mejor darnos prisa.
Los profesor alzaron la ceja, es que ¿Esos chicos estaban
siempre alerta?
—Cuanto antes le
saquemos a Malfoy una declaración, mejor —gruñó Ron—. ¿No piensas igual? Se ve que después del
partido de quidditch estaba tan sulfurado que la tomó con Colin.
—Hay alguien más
—dijo Harry, contemplando a Hermione, que partía manojos de centinodia y los
echaba a la poción—. Dobby vino en mitad de la noche a hacerme una visita.
-Lo sabemos- dijo Sirius rodando los ojos
-pero ellos en ese entonces no lo sabían Sirius- dijo
Andromeda con paciencia
Ron y Hermione
levantaron la mirada, sorprendidos. Harry les contó todo lo que Dobby le había
dicho... y lo que no le había querido decir. Ron y Hermione lo escucharon con la boca abierta.
—¿La Cámara de los
Secretos ya fue abierta antes? —le preguntó Hermione.
La mirada de los que sabían la historia y el asesinato se ensombreció.
—Es evidente —dijo
Ron con voz de triunfo— Lucius Malfoy abriría la cámara en sus tiempos de
estudiante y ahora le ha explicado a su querido Draco cómo hacerlo.
-Nosotros no hemos sido- dijeron Lucius y Draco al mismo
tiempo al sentir la mirada de todos sobre ellos
Está claro. Sin
embargo, me gustaría que Dobby te hubiera dicho qué monstruo hay en ella. Me
gustaría saber cómo es posible que nadie se lo haya encontrado merodeando por
el colegio.
-En ninguna situación y jamás de los jamaces, relacionen
Slytherin con merodear- reprocho James, mientras Remus y Sirius asentían- Y
hablando de merodear ¿Dónde esta Peter?
-El joven Pettigrew, esta en mi oficina y vendrá para la
lectura del tercer libro.- dijo secamente Dumbledore, Peter estaba en su
despacho custodiado por dos aurores que habían sido advertidos de su animagia.
—Quizá pueda volverse
invisible —dijo Hermione, empujando unas sanguijuelas hacia el fondo del
caldero—. O quizá pueda disfrazarse, hacerse pasar por una armadura o algo así.
He leído algo sobre fantasmas camaleónicos...
-No puedo creer que digas semejante tontería- acoto una
morena desde Hufflepuff
-No puedo creer que haya gente que tenga con mas aspecto de
zorra que una prostituta, que divertido…parece que hoy las dos nos hemos sorprendido-
dijo copiando el tono agudo de la chica y haciendo reir a todos, especialmente
a Ron, Harry y Ginny
—Lees demasiado,
Hermione —le dijo Ron, echando crisopos encima de las sanguijuelas. Arrugó la
bolsa vacía de los crisopos y miró a Harry—. Así que fue Dobby el que no nos dejó coger el tren
y el que te rompió el brazo... — Movió la cabeza—. ¿Sabes qué, Harry? Si no
deja de intentar salvarte la vida, te va a matar.
Lily palideció
-Dobby no pretendía jamás matar al señor Harry Potter, Dobby
seria incapaz, Dobby solo quería proteger a Harry Potter de algo peor que un
golpe de bludger
-Tranquilo Dobby, ya paso todo- lo tranquilizo el ojiverde
La noticia de que
habían atacado a Colin Creevey y de que éste yacía como muerto en la enfermería
se extendió por todo el colegio durante la mañana del lunes. El ambiente se llenó de rumores y
sospechas.
-Como sucede siempre en Hogwarts- dijo resignada Alice
Los de primer curso
se desplazaban por el castillo en grupos muy compactos, como si temieran que los
atacaran si iban solos.
-Es bastante prudente- felicito Minerva
Ginny Weasley,
La pelirroja temblo entre los brazos de Harry que la abraza
protectoramente
que se sentaba junto
a Colin Creevey en la clase de Encantamientos, estaba consternada, pero a Harry
le parecía que Fred y George se equivocaban en la manera de animarla.
Los Weasley los miraron inquisitivamente y los gemelos
miraron en otra generación
Se turnaban para esconderse
detrás de las estatuas, disfrazados con una piel, y asustarla cuando pasaba. Pero
tuvieron que parar cuando Percy se hartó y les dijo que iba a escribir a su
madre para contarle que por su culpa Ginny tenía pesadillas.
Molly iba a regañarlos pero fue Bill quien intervino, ya que
su hermanita era su debilidad
-¿LES PARECE GRACIOSO HACERLE DAÑO A GINNY? ¡DEBERIAN
AYUDARLA! ¡SON UNOS EGOISTAS! ¿LES PARECE QUE LO QUE LE HACEN A RON Y GINNY ES
DE BUENOS HERMANOS?
Charlie agrego
-¡SON MAYORES QUE ELLOS! Ellos eran pequeños y había gente
que estaba siendo atacada, no es solo por una absurda broma, no he visto en ya
casi dos años que han contado en los libros una sola vez que se preocuparan por
proteger a Ron o Ginny
Fred y George se miraron con mucha culpa, sus hermanos tenían
razón, siempre absortos por sus bromas y sus planes juntos que olvidaban de
ayudar a sus dos hermanos, incluso empeorándolo mas
-Esta bien chicos, cada uno es como es- murmuro Ginny
-No esta bien- corto Fred- lo sentimos Ginny
-Tu también Ron- agrego George, Molly sonrio levemente, ella
sabia que todos sus hijos se querían, pero había cierto comportamientos que
definitivamente deberían cambiar
Mientras tanto, a escondidas de los
profesores, se desarrollaba en el colegio un mercado de talismanes, amuletos y otros chismes
protectores.
-Es algo que Dung haría- murmuro Sirius
Neville Longbottom
había com prado una gran cebolla verde, cuyo olor decían que alejaba el mal, un
cristal púrpura acabado en punta y una cola podrida de tritón
Todos rieron incluido el mismo Neville
antes de que los demás chicos de Gryffindor le
explicaran que él no corría peligro, porque tenía la sangre limpia y por tanto
no era probable que lo atacaran.
-Es casualidad- conto Alice- ni a Frank ni a mi nos importa
ser sangre pura
—Fueron primero por
Filch —dijo Neville, con el miedo escrito en su cara redonda—y todo el mundo
sabe que yo soy casi un squib.
-No lo eres- dijo Hermione con decisión
-admite que en esa época casi lo era
-Neville, puede que a tus 12 años no fueras el mago mas
habilidoso del planeta, pero ninguno nació sabiendo…todos aprendimos con la
practica- dijo Ginny
Durante la segunda
semana de diciembre, la profesora McGonagall pasó, como de costumbre, a recoger
los nombres de los que se quedarían en el colegio en Navidades.
Sirius y Harry sonrieron
Harry, Ron y Hermione firmaron en la lista;
-Siempre juntos…¿a quien me suena?- comento Lily con ternura
mirando a los merodeadores
habían oído que Malfoy se quedaba, lo cual les
pareció muy sospechoso. Las vacaciones serían
un momento perfecto para utilizar la poción multijugos e intentar sonsacarle
una confesión.
-Buen plan- felicito Moody
Por desgracia, la
poción estaba a medio acabar. Aún necesitaban el cuerno de bicornio y la piel
de serpiente arbórea africana, y el único lugar del que podrían sacarlos era el
armario privado de Snape.
Los merodeadores, Prewett y los gemelos Weasley sonrieron de
lado
A Harry le parecía
que preferiría enfrentarse al monstruo legendario de Slytherin a tener que soportar
las iras de Snape si lo pillaba robándole en el despacho.
Severus sonrio mentalmente, al menos Potter le tenia miedo.
—Lo que tenemos que
hacer —dijo animadamente Hermione, cuando se acercaba la doble clase de
Pociones de la tarde del jueves— es distraerle con algo. Entonces uno de
nosotros podrá entrar en el despacho de Snape y coger lo que necesitamos.
—Harry y Ron la miraron nerviosos
-oh vamos, ¿se enfrentan
con Voldemort pero no le roban unos escarabajos muertos a Quejicus?-
pregunto Sirius indignado
-Canuto recuerda que Quejicus puede tenerlos limpiando moco
de dragon durante todos los sabados – le recordó Remus por lo bajo
—. Creo que es mejor que
me encargue yo misma del robo —continué Hermione, como si tal cosa
Todos la miraron con los ojos abiertos de par en par
-¿Qué?- dijo indignada- continúen
—. A vosotros dos os
expulsarían si os pillaran en otra, mientras que yo tengo el expediente limpio. Así que no tenéis más que
originar un tumulto lo suficientemente importante para mantener ocupado a Snape
unos cinco minutos.
-Buen plan- felicito Charlie ganándose una mala mirada de su
madre- ¿Qué? Es por una buena causa- se justifico
Harry sonrió
tímidamente. Provocar un tumulto en la clase de Pociones de Snape era tan
arriesgado como pegarle un puñetazo en el ojo a un dragón dormido.
Todos soltaron risitas
Las clases de
Pociones se impartían en una de las mazmorras más espaciosas. Aquella tarde de
jueves, la clase se desarrollaba como siempre.
-Por ahora- murmuro George con sorna
Veinte calderos
humeaban entre los pupitres de madera, en los que descansaban balanzas de latón
y jarras con los ingredientes. Snape rondaba por entre los fuegos, haciendo
comentarios envenenados sobre el trabajo de los de Gryffindor, mientras los de
Slytherin se reían a cada crítica.
Minerva fulmino con la mirada a Severus, quien estaba muy
ocupado agachando la cabeza para ocultarse de la mirada decepcionada de cierta
pelirroja
Draco Malfoy, que era
el alumno favorito de Snape,
Narcissa le sonrio levemente
hacia burla con los
ojos a Ron y Harry, que sabían que si le contestaban tardarían en ser
castigados menos de lo que se tarda en decir «injusto».
-Estupido quejicus- escupió James con furia
-mi amor, por favor…- suplico Lily
-si lo se- suspiro cansinamente- eres demasiado buena
persona Lils.
A Harry la pócima
infladora le salía demasiado líquida,
Lily, Severus y Slughorn fruncieron el ceño levemente
pero en aquel momento
le preocupaban otras cosas más importantes.
-Nunca pensé decirlo, pero en esas circunstancias si había cosas
mas importantes que las clases de pociones- reconoció Percy
Aguardaba una seña de
Hermione, y apenas prestó atención cuando Snape se detuvo a mirar con desprecio
su poción agnada. Cuando Snape se volvió y se fue a ridiculizar a Neville,
Frank y Alice lo fulminaron con la mirada
Hermione captó la
mirada de Harry; y le hizo con la cabeza un gesto afirmativo.
-esto se pone bueno- dijo Fabian frotándose la mano como
quien va a comer un plato delicioso
Harry se agachó
rápidamente y se escondió detrás de su caldero, se sacó de un bolsillo una de
las bengalas del doctor Filibuster que tenía Fred,
-me alegra saber que le diste buen uso- dijo Fred divertido
y le dio un golpe con
la varita. La bengala se puso a silbar y echar chispas. Sabiendo que sólo
contaba con unos segundos, Harry se levantó, apuntó y la lanzó al aire. La
bengala aterrizó dentro del caldero de Goyle. La poción de Goyle estalló,
rociando a toda la clase.
Todos en el gran comedor victorearon, pero nadie mas que los
merodeadores, especialmente James que gritaba cosas “¡Digno hijo de su padre!” “¡Ese
es mi merodeadorito!”
Lily se mordió el labio y beso a James
-Es un mini tu- dijo feliz
-¿eso es bueno?- pregunto el
-es maravilloso- Harry
veía feliz como sus padres se besaban, definitivamente estos libros habían sido
lo mejor que podía pasarle
Los alumnos chillaban
cuando los alcanzaba la pócima infladora. A Malfoy le salpicó en toda la cara,
y la nariz se le empezó a hinchar como
un balón;
Todos rieron, Draco se sonrojo levemente
-que suerte que el profesor Snape pudo arreglarla- dijo
Astoria acariciando el punte de la nariz del rubio- asi eres perfecto- agrego besándole
en el cuello
Goyle andaba a ciegas
tapándose los ojos con las manos, que se le pusieron del tamaño de platos soperos,
mientras Snape trataba de restablecer la calma y de entender qué había
sucedido.
Los merodeadores sonrieron anchamente
Harry vio a Hermione
aprovechar la confusión para salir discretamente por la puerta.
-asi se hace- felicito Ron abrazandola
—¡Silencio!
¡SILENCIO! —gritaba Snape—. Los que hayan sido salpicados por la poción, que
vengan aquí para ser curados. Y cuando averigüe quién ha hecho esto...
-Hubiese sido genial si la poción lo hubiese salpicado ¿no
creen?- comento Dorcas por lo bajo
Harry intentó
contener la risa cuando vio a Malfoy apresurarse hacia la mesa del profesor,
con la cabeza caída a causa del peso de la nariz, que había llegado a alcanzar el tamaño de un pequeño
melón.
Todos rieron y Astoria frunció el sueño enojada
Mientras la mitad de
la clase se apiñaba en torno a la mesa de Snape, unos quejándose de sus brazos del
tamaño de grandes garrotes, y otros sin poder hablar debido a la hinchazón de
sus labios,
-Es una gran idea-comento George
- ¿Cómo no se nos ocurrió?- agrego Fred
Harry vio que
Hermione volvía a entrar en la mazmorra, con un bulto debajo de la túnica.
-¡Eso es cuñada!- felicitaron los Weasley
Cuando todo el mundo
se hubo tomado un trago de antídoto y las diversas hinchazones remitieron, Snape se fue hasta el
caldero de Goyle y extrajo los restos negros y retorcidos de la bengala. Se
produjo un silencio repentino.
-Nadie podía creerlo- dijo Neville con una sonrisa
—Si averiguo quién ha
arrojado esto —susurró Snape—me aseguraré de que lo expulsen.
-Nunca lo supo- murmuro Ron con suficiencia
Harry puso una cara
que esperaba que fuera de perplejidad. Snape lo miraba a él, y la campana que
sonó al cabo de diez minutos no pudo ser mejor bienvenida.
-Un problema menos- suspiro Molly aliviada
—Sabe que fui yo
—dijo Harry a Ron y Hermione, mientras iban deprisa a los aseos de Myrtle la
Llorona—. Podría jurarlo.
Albus sonrio levemente mirando a Severus
Hermione echó al
caldero los nuevos ingredientes y removió con brío.
—Estará lista dentro
de dos semanas —dijo contenta.
-Excelente, toda una maravilla- felicito Slughorn- ¡Ni Lily
Evans lo abria hecho mejor!
-Gracias profesor- dijeron ambas sonrojadas, mientras Ron y
James las miraban divertidos
—Snape no tiene
ninguna prueba de que hayas sido tú —dijo Ron a Harry, tranquilizándolo—. ¿Qué puede hacer?
-exactamente- dijo Bill
—Conociendo a Snape,
algo terrible —dijo Harry, mientras la poción levantaba borbotones y espuma.
Slughorn asintió aprovativamente
Una semana más tarde,
Harry, Ron y Hermione cruzaban el vestíbulo cuando vieron a un puñado de gente
que se agolpaba delante del tablón de anuncios para leer un pergamino que
acababan de colgar.
Varios miraron con curiosidad el libro
Seamus Finnigan y Dean Thomas les hacían
señas, entusiasmados.
-¿Por qué todo paso en su generación?- se quejo Sirius con
un puchero, todos los ignoraron. (Pobre mi cachorrito sexy :C )
—¡Van a abrir un club
de duelo! —dijo Seamus—. ¡La primera sesión será esta noche! No me importaría
recibir unas clases de duelo, podrían ser útiles en estos días...
-Es una gran idea, me pregunto a quien se ocurrió- comento
Marlene
-No quieres saberlo- dijeron los del futuro a coro
-que no sea lo que estoy pensando- rogo Dorcas
—¿Por qué? ¿Acaso
piensas que se va a batir el monstruo de Slytherin?—preguntó Ron, pero lo
cierto es que también él leía con interés el cartel.
—Podría ser útil —les
dijo a Harry y Hermione cuando se dirigían a cenar—. ¿Vamos?
-¿No iban a ningun lado separados?- pregunto Andromeda,
ellos negaron con la cabeza
Harry y Hermione se
mostraron completamente a favor, así que aquella noche, a las ocho, se
dirigieron deprisa al Gran Comedor. Las grandes mesas de comedor habían
desaparecido, y adosada a lo largo de una de las paredes había una tarima
dorada, iluminada por miles de velas que flotaban en el aire.
Todos escuchaban atentos, menos Harry que estaba muy ocupado
acariciando los hombros de Ginny masajeándola, el ojiverde se había propuesto
por todos los medios no dejar que Ginny sufriera en el transcurso del libro o
por lo menos, que sufriera lo menos posible.
El techo volvía a ser
negro, y la mayor parte de los alumnos parecían haberse reunido debajo de él,
portando sus varitas mágicas y aparentemente entusiasmados.
-era mas la ansiedad por hacer magia que por aprender algo-
dijo Neville
—Me pregunto quién
nos enseñará —dijo Hermione, mientras se internaban en la alborotada multitud—.
Alguien me ha dicho que Flitwick fue campeón de duelo cuando era joven, quizá
sea él.
Flitwick se sonrojo ante los aplausos de los estudiantes
—Con tal de que no
sea... —Harry empezó una frase que terminó en un gemido: Gilderoy Lockhart se
encaminaba a la tarima, resplandeciente en su túnica color ciruela oscuro, y lo
acompañaba nada menos que Snape, con su usual túnica negra.
-Este es un extraño y espeluznante momento en que quiero que
Quejicus gane- dijo James confundido
- Lo se, es escalofriante- apoyo Sirius fingiendo un
escalofrio
Lockhart rogó
silencio con un gesto del brazo y dijo:
—¡Venid aquí,
acercaos! ¿Me ve todo el mundo? ¿Me oís todos? ¡Estupendo! El profesor
Dumbledore me ha concedido permiso para abrir este modesto club de duelo, con
la intención de prepararos a todos vosotros por si algún día necesitáis
defenderos tal como me ha pasado a mí en incontables ocasiones (para más
detalles, consultad mis obras).
-¿es que no puede hablar dos palabras sin hacerse
publicidad?- dijo Frank asqueado
-Remusin me estoy aburriendo- se quejo Tonks
-¿remusin?- rio Sirius
-¿te molesta que te llame asi?- pregunto ella con un puchero
-claro que no me molesta Dora- dijo el con una sonrisa
-Remusin- seguían riendo Sirius y James
»Permitidme que os
presente a mi ayudante, el profesor Snape —dijo Lockhart, con una amplia sonrisa
-¿Ayudante?- dijo Lucius- Severus lo asesinara- dijo
divertido
— Él dice que sabe un
poquito sobre el arte de batirse,
-¿un poquito?- ironizo Severus asqueado- Podria asesinarlo
ahora mismo si quisiera, maldito hijo de…
-Severus- le calmo Albus- el vocabulario por favor.
y ha accedido
desinteresadamente a ayudarme en una pequeña
demostración antes de empezar. Pero no quiero que os preocupéis los más jóvenes:
no os quedaréis sin profesor de Pociones después de esta demostración, ¡no
temáis!
Todos estaban ansiosos porque Severus le pateara el trasero
a Lockhart
—¿No estaría bien que
se mataran el uno al otro? —susurró Ron a Harry
al oído.
-Seria un mundo perfecto- suspiro añorante Sirius haciendo
reir a los que escucharon
En el labio superior
de Snape se apreciaba una especie de mueca de desprecio. Harry se preguntaba
por qué Lockhart continuaba sonriendo; si Snape lo hubiera mirado como miraba a
Lockhart, habría huido a todo correr en la
dirección opuesta.
Severus sonrio con suficiencia
Lockhart y Snape se
encararon y se hicieron una reverencia. O, por lo menos, la hizo Lockhart, con
mucha floritura de la mano, mientras Snape movía la cabeza de mal humor. Luego
alzaron sus varitas mágicas frente a ellos como si fueran espadas.
-Esto será interesante- dijeron los gemelos prewett con una
sonrisa malisiosa
—Como veis,
sostenemos nuestras varitas en la posición de combate convencional —explicó
Lockhart a la silenciosa multitud—. Cuando cuente tres, haremos nuestro primer
embrujo. Pero claro está que ninguno de los dos tiene intención de matar.
-No creo que eso sea cierto- dijo Lily mirando con una
pequeña sonrisa a Severus
—Yo no estaría tan
seguro —susurró Harry, viendo a Snape enseñar los dientes.
—Una..., dos... y
tres.
Ambos alzaron las
varitas y las dirigieron a los hombros del contrincante.
Todos estaban expectantes
Snape gritó:
—¡Expelliarmus!
Resplandeció un
destello de luz roja, y Lockhart despegó en el aire, voló hacia atrás, salió de
la tarima, pegó contra el muro y cayó resbalando por él hasta quedar tendido en
el suelo.
Todos en el gran comedor aplaudieron ante la vista
sorprendida de Severus, aunque a el, el único aplauso que le importaba era el
de cierta pelirroja
Malfoy y algunos
otros de Slytherin vitorearon. Hermione se puso de puntillas.
Ron carraspeo y ella lo beso en la mejilla
-era solo una niña y el era solo un hombre supuestamente
guapo y que según lo que nos hizo creer era un gran heroe
-¿supuestamente guapo?- murmuro
-para mi el único hombre guapo eres tu- dijo ella haciéndolo
sonreir anchamente
—¿Creéis que estará
bien? —chilló por entre los dedos con que se tapaba la cara.
-¿A quien le preocupa?- dijeron Sirius y James al mismo
tiempo.
—¿A quién le
preocupa? —dijeron Harry y Ron al mismo tiempo
Todos rieron por la coincidencia
Lockhart se puso de
pie con esfuerzo. Se le había caído el sombrero y su pelo ondulado se le había
puesto de punta.
-En este momento abrazaria a Snape- dijo Marlene divertida
—¡Bueno, ya lo habéis
visto! —dijo, tambaleándose al volver a la tarima— Eso ha sido un encantamiento de desarme; como podéis ver, he
perdido la varita...
Todos rieron a carcajadas
¡Ah, gracias, señorita Brown!
Hermione frunció el ceño ante la mención de Lavender
Sí, profesor Snape,
ha sido una excelente idea enseñarlo a los alumnos, pero si no le importa que
se lo diga, era muy evidente que iba a atacar de esa manera. Si hubiera querido
impedírselo, me habría resultado muy fácil. Pero pensé que sería instructivo
dejarles que vieran...
-No creo que sea bueno tentar de esa manera a Severus-
murmuro Remus con una sonrisa
Snape parecía
dispuesto a matarlo, y quizá Lockhart lo notara, porque dijo:
—¡Basta de
demostración!
Otra ronda de risas
Vamos a colocaros por
parejas. Profesor Snape, si es tan amable de ayudarme... Se metieron entre la
multitud a formar parejas. Lockhart puso a Neville con Justin Finch-Fletchley,
pero Snape llegó primero hasta donde estaban Ron y Harry
Los merodeadores y Lily fruncieron el ceño
—Ya es hora de
separar a este equipo ideal, creo —dijo con expresión desdeñosa—. Weasley,
puedes emparejarte con Finnigan. Potter...
-¿Por qué tenias que arruinarlo?- pregunto Lily dolida,
Snape solo atino a bajar la cabeza para esquivar su mirada
Harry se acercó
automáticamente a Hermione.
Todos sonrieron, incluidos Harry y Hermione
—Me parece que no
—dijo Snape, sonriendo con frialdad—. Señor Malfoy, aquí. Veamos qué puedes
hacer con el famoso Potter. La señorita Granger que se ponga con Bulstrode.
-Mi hijo acabara con tu mestizo Potter- dijo Lucius con
petulancia
-Mi hijo le pateara el trasero a tu niño mimado sangre pura
Malfoy- respondió James
-Sus hijos quieren seguir escuchando la lectura- corto Draco
con frialdad y Harry asintió de acuerdo
Malfoy se acercó
pavoneándose y sonriendo. Detrás de él iba una chica de Slytherin que le
recordó a Harry una foto que había visto en Vacaciones con las brujas. Era alta
y robusta, y su poderosa mandíbula sobresalía agresivamente.
-Igual al padre, por desgracia para la niña- murmuro Dorcas
pensando en Bulstrode que se había graduado hace dos años
Hermione la saludó
con una débil sonrisa que la otra no le devolvió.
-¿despues se jactan de tener mejor educación que los “sangre
sucia”?- dijo Lily haciendo las comillas con los dedos- Solo son una manga de
narcisistas y discriminadores con aires de grandeza
-¿Qué puedes saber tu de linaje?- dijo Malfoy con desden
-Haber Malfoy, supongamos que te quitaste el apellido, ¿Qué te
diferencia de mi? Ademas de los obvios valores de tolerancia y dignidad- Malfoy
balbuceo algo pero no supo que contestar, Lily sonrio conforme consigo misma
-esa es mi chica- dijo James orgulloso abrazandola
—¡Poneos frente a
vuestros contrincantes —dijo Lockhart, de nuevo sobre la tarima— y haced una
inclinación!
-¿Malfoy tiene a Quejicus y Harry a Lockhart?- dijo Sirius
asqueado- Si Harry me tuviera a mi de mentor le patearía el trasero a
cualquiera
Harry y Malfoy apenas
bajaron la cabeza, mirándose fijamente.
—¡Varitas listas!
—gritó Lockhart—. Cuando cuente hasta tres, ejecutad vuestros hechizos para
desarmar al oponente. Sólo para desarmarlo; no queremos que haya ningún
accidente. Una, dos y... tres.
-Vamos cachorro- alentó Sirius
Harry apuntó la
varita hacia los hombros de Malfoy, pero éste ya había empezado a la de dos.
-Claro, tenia que ser un Malfoy.- Bramo Sirius divertido.
Lucius se limito a casi matarlo con la mirada
Su conjuro le hizo el
mismo efecto que si le hubieran golpeado en la cabeza con una sartén. Harry se
tambaleó pero aguantó.
- Valiente, como su madre.- Dijo James viendo embobado a
Lily, mientras que Harry sonreía mirando a su padre
y sin perder tiempo, dirigió contra Malfoy su
varita, diciendo:
—¡Rictusempra!
-Buena elección- dijo Remus sonriendo
Un chorro de luz
plateada alcanzó a Malfoy en el estómago, y el chico seretorció, respirando con
dificultad.
- ¡Bravo! Muy bien, le diste su merecido al pelos de elote.-
Vitoreo Sirius, mientras veía a Lucius con suficiencia. Algunas risitas se
escucharon por lo largo y ancho del salón, mientras que Draco solto un leve
gruñido.
- ¡Mejor cierra la boca, traidor!- Grito Lucius pero no hubo tiempo de mas, pues rápidamente
se continuo con la lectura.
—¡He dicho sólo
desarmarse! —gritó Lockhart a la combativa multitud
Cuando Malfoy cayó de
rodillas; Harry lo había atacado con un encantamiento de cosquillas, y apenas
se podía mover de la risa.
- Y el aprovechado es soy yo…- Murmuro Draco.
Harry no volvió a
atacar, porque le parecía que no era deportivo hacerle a Malfoy más
encantamientos.
- Harry, y sus excelentes valores morales.- Dijeron los
gemelos mirándose el uno al otro con picardia, parecían recordar.
- Es buena persona como Lily.- Dijo Marlene sonriéndole.
Lily le devolvió la sonrisa.
Mientras estaba en el
suelo, pero fue un error. Tomando aire, Malfoy apuntó la varita a las rodillas
de Harry, y dijo con voz ahogada:
—¡Tarantallegra!
Un segundo después, a
Harry las piernas se le empezaron a mover a saltos, fuera de control, como si
bailaran un baile velocísimo.
- Es buena persona, pero eres muy ingenuo- Dijo Remus
- Igual que su padre.- Sonrio de lado Sirius.
- Gracias por la ayuda eh.- Contesto Harry desde un rincón,
un poco ofendido.
- Tranquilo Harry.- Dijo Hermione.
- Si, el lado bueno, es que Lockhart es el idiota de los
idiotas.- Dijo George, y la gente rompió a reir a carcajadas.
—¡Alto!, ¡alto!
—gritó Lockhart, pero Snape se hizo cargo de la situación.
- Ah, Snivellus ¡Siempre de…
- ¡Sirius!.- Regaño Remus, evitando se le saliera una mala
palabra, Sirius lo miro con cara de resignación.
—¡Finite incantatem!
—gritó. Los pies de Harry dejaron de bailar, Malfoy dejó de reír y ambos
pudieron levantar la vista. Una niebla de humo verdoso se cernía sobre la sala.
Tanto Neville como Justin estaban tendidos en el suelo, jadeando.
- Aun no entiendo, porque el director dejo a tremendos
idiotas hacerse cargo de un club de duelo.- Dijo Neville apenado, al recordar
todo aquello.
- Sera porque eran los únicos idiotas disponibles.-
Contestaron los gemelos.
- ¡¿Pueden de dejar de decir idioteces y poner atención?!.-
Regaño Hermione. Los merodeadores sonrieron de lado, al ver la cara de los
chicos. Mientras que Severus escuchaba y permanecia frio y rigido.
Ron sostenía a
Seamus, que estaba lívido, y le pedía disculpas por los efectos de su varita
rota; pero Hermione y Millicent Bulstrode no se habían detenido.
- No me sorprende…- Exclamo Ron recordando a la tosca
Slytherin
Millicent tenía a
Hermione agarrada del cuello y la hacía gemir de dolor. Las varitas de las dos
estaban en el suelo.
- ¡Cuanta agresividad!.- Se asombro Lily.- Pero me imagino,
que Severus las calmo.- Dijo ella mirándolo de reojo.
- No, no recuerdo que sucedió.- Dijo Hermione negando con la
cabeza.
Harry se acercó de un salto y apartó a
Millicent. Fue difícil, porque era mucho más robusta que él.
- Justo lo que me calienta, una chica que me saque 3 cabezas
de altura- suspiro Sirius haciendo reir a todos
—Muchachos,
muchachos... —decía Lockhart, pasando por entre los estudiantes, examinando las
consecuencias de los duelos—. Levántate, Macmillan..., con cuidado, señorita
Fawcett..., pellízcalo con fuerza, Boot, y dejará de sangrar enseguida...
- ¡Que barbaridad Albus! Haber contratado a alguien asi…- Se
lamentaba la profesora McGonagall.
- Minerva, no creo que yo haya tenido demasiadas opciones-
Respondio sereno, aunque también estaba sorprendido por la conducta de
Lockhart.
»Creo que será mejor
que os enseñe a interceptar los hechizos indeseados —dijo Lockhart, que se
había quedado quieto, con aire azorado, en medio del comedor. Miró a Snape y al ver que le
brillaban los ojos, apartó la vista de inmediato
- Lo entiendo, nadie soporta ver a Quejicus mas de 5
segundos.- Dijo Sirius
—. Necesito un par de
voluntarios... Longbottom y Finch-Fletchley, ¿qué tal vosotros?
—Mala idea, profesor
Lockhart —dijo Snape, deslizándose como un murciélago grande y malévolo—.
Longbottom provoca catástrofes con los hechizos más simples, tendríamos que
enviar a Finch-Fletchley a la enfermería en una caja de cerillas.
- El burro hablando de orejas.- Se quejo Sirius.- Si
Snivellus es experto en algo, es en catástrofes.- Las risas no se hicieron
esperar. Snape estaba comenzando a hartarse de la situación. Y Neville le
obsequio a Canuto una mirada de gratitud.
- Canuto.- Reprendio James divertido.
—La cara sonrosada de
Neville se puso de un rosa aún más intenso—. ¿Qué tal Malfoy y Potter? —dijo
Snape con una sonrisa malvada.
—¡Excelente idea!
—dijo Lockhart, haciéndoles un gesto para que se acercaran al centro del Salón,
al mismo tiempo que la multitud se apartaba para dejarles sitio—. Veamos, Harry
—dijo Lockhart—, cuando Draco te apunte con la varita, tienes que hacer esto…
- ¿Correr?.- Dijo un gemelo.
- ¿Llorar?.- Prosiguio el otro.
- ¡Gritar!.- Dijeron ambos al unisono.
…Levantó la varita,
intentó un complicado movimiento, y se le cayó al suelo. Snape sonrió y Lockhart se apresuró a
recogerla, diciendo:
—¡Vaya, mi varita
está un poco nerviosa!
- Si claro…- Comenzo Fabian
- es culpa de la varita!.- termino Gideon
- Aun no puedo creer, que ese inútil se haya hecho pasar por
nuestro profesor.- Dijo Hermione, apenada.
Snape se acercó a
Malfoy, se inclinó y le susurró algo al oído. Malfoy también sonrió. Harry miró
asustado a Lockhart y le dijo:
—Profesor, ¿me podría
explicar de nuevo cómo se hace eso de interceptar?
—¿Asustado? —murmuró
Malfoy, de forma que Lockhart no pudiera oírle.
- Claro Draco, demuéstrale, lo que vale un Malfoy.- Dijo
Lucius, un tanto emocionado, mirando a James ufanamente.
—Eso quisieras tú —le
dijo Harry torciendo la boca.
- ¡Bien Mini-cornamenta! No eres un cobarde.- Dijo James,
devolviéndole la mirada a Lucius
-¡Basta ustedes dos!- dijo Lily molesta- ¡son sus hijos, no
un partido de Quidditch!
-¡Tambien apuesten haber cual chorreara sangre primero!-
secundo Narcissa, tanto James como Lucius se sentaron y bajaron la cabeza por
miedo a la reprimenda de parte de sus novias
Lockhart dio una
palmada amistosa a Harry en el hombro.
—¡Simplemente, hazlo
como yo, Harry!
—¿El qué?, ¿dejar
caer la varita?
- ¿El ridículo?.- Pregunto Sirius. Emocionado por lo que
pudiera pasar.
Pero Lockhart no le
escuchaba.
—Tres, dos, uno, ¡ya!
—gritó. Malfoy levantó rápidamente la varita y bramó:
—¡Serpensortia!
Hubo un estallido en
el extremo de su varita. Harry vio, aterrorizado, que de ella salía una larga
serpiente negra, caía al suelo entre los dos y se erguía, lista para atacar. Todos se echaron atrás
gritando y despejaron el lugar en un segundo.
- Bien.- Dijo Lucius sonriente y con suficiencia.
—No te muevas, Potter
—dijo Snape sin hacer nada, disfrutando claramente de la visión de Harry, que
se había quedado inmóvil, mirando a los ojos
a la furiosa serpiente—. Me encargaré de ella...
- Espero que se encargue de ella, tan bien como se encarga
de proteger su virginidad-dijo Sirius por “lo bajo” haciendo que todos rian
—¡Permitidme! —gritó
Lockhart. Blandió su varita apuntando a la serpiente y se oyó un disparo: la
serpiente, en vez de desvanecerse, se elevó en el aire unos tres metros y volvió a caer al suelo con
un chasquido.
-Que inepto- bufo Lily
Furiosa, silbando de
enojo, se deslizó derecha hacia Finch-Fletchley y se irguió de nuevo, enseñando
los colmillos venenosos.
Todos tragaron grueso nerviosos
Harry no supo por qué
lo hizo, ni siquiera fue consciente de ello. Sólo percibió que las piernas lo
impulsaban hacia delante como si fuera sobre ruedas y que gritaba absurdamente
a la serpiente: «¡Déjale!» Y milagrosa e inexplicablemente, la serpiente bajó
al suelo, tan inofensiva como una gruesa manguera negra de jardín, y volvió los
ojos a Harry. A éste se le pasó el miedo.
Todos miraron confundidos al ojiverde
-¿la serpiente te hizo caso?- dijo Lucius sin terminar de
creerlo- nunca supe de nadie que hiciera eso, salvo…
-Voldemort- concluyo Albus, mirando fijamente al ojiverde,
todos se estremecieron ante la mención del nombre.
Sabía que la
serpiente ya no atacaría a nadie, aunque no habría podido explicar por qué lo
sabía. Sonriendo, miró a Justin, esperando verlo aliviado, o confuso, o agradecido,
pero ciertamente no enojado y asustado.
-¡es un imbesil!- dijo James molesto- ¡tu lo ayudas y el se
enfada!
-papa ¿tu que harias si hay una serpiente atacándote y un
chico habla parsel?- James estaba demasiado feliz por la palabra ‘papa’ como
para pensar una respuesta coherente
—¿A qué crees que
jugamos? —gritó, y antes de que Harry pudiera contestar, se había dado la vuelta
y abandonaba el salón. Snape se acercó, blandió la varita y la serpiente
desapareció en una pequeña nube de humo negro. También Snape miraba a Harry de
una manera rara; era una mirada astuta y calculadora que a Harry no le gustó.
-Tu esperabas que eso pasara- dijo Lily- ¡tu querías que pensaran
que el es el de los ataques!- Severus miro hacia otro lado- ¡TU QUERIAS QUE
PENSARAN QUE ERA EL!- grito colerica
-Lils, no es por defenderlo ni nada, todo lo contrario, pero
aun esas cosas no pasan- dijo James intentando relajarla
Fue vagamente
consciente de que a su alrededor se oían unos inquietantes murmullos. A continuación, sintió que alguien le tiraba de
la túnica por detrás.
—Vamos —le dijo Ron
al oído—. Vamos...
-Gracias por sacarlo de ahí- dijo Lily agradecida
Ron lo sacó del
salón, y Hermione fue con ellos. Al atravesar las puertas, los estudiantes se apartaban como si les diera miedo contagiarse.
Todos fruncieron el ceño enfadados
Harry no tenía ni idea de lo que pasaba, y ni
Ron ni Hermione le explicaron nada hasta llegar a la sala común de Gryffindor,
que estaba vacía.
-Que extraño- murmuro Alice
Entonces Ron sentó a Harry
en una butaca y le dijo:
—Hablas pársel. ¿Por
qué no nos lo habías dicho?
-No sabias que podias hacerlo- dijo Remus, no era una
pregunta.
—¿Que hablo qué?
—dijo Harry.
-¿Cómo puedes hablar algo que ni sabes lo que es?- pregunto
Frank confundido
—¡Pársel! —dijo Ron—.
¡Puedes hablar con las serpientes!
—Lo sé —dijo Harry—.
Quiero decir, que ésta es la segunda vez que lo hago. Una vez, accidentalmente,
le eché una boa constrictor a mi primo Dudley en el zoo... Es una larga historia... pero
ella me estaba diciendo que no había estado nunca en Brasil, y yo la liberé sin
proponérmelo. Fue antes de saber que era un mago...
- Y fue muy gracioso- dijo Sirius divertido, James y Lily lo
miraron reprochantes- ¿Qué? Mi cachorro habla parsel ¿a quien le importa? Un niñato
imbesil se enojo con el ¿a quien le importa?...Harry es un gran chico, el que
opine lo contrario me lo paso por el…
-¡sirius!- le cortaron Molly, Lily, Minerva y Hermione
—¿Entendiste que una
boa constrictor te decía que no había estado nunca en Brasil? —repitió Ron con
voz débil.
-Oh por merlin, ¿Qué importancia tiene donde ha estado una
boa?- dijo James- Yo solo quiero saber quienes son los que hablan de mi hijo
para poder embrujarlos cuando hayan nacido
-¡JAMES!- regaño Lily entre enfadada y divertida
—¿Y qué? —preguntó
Harry—. Apuesto a que pueden hacerlo montones de personas.
-Es algo poco común- corrigio Alastor
—Desde luego que no
—dijo Ron—. No es un don muy frecuente. Harry, eso no es bueno.
-No necesariamente es malo- agrego Albus- es solo una
habilidad especial, es Harry quien decide si usarla para el bien o para el mal
—¿Que no es bueno?
—dijo Harry, comenzando a enfadarse—. ¿Qué le pasa a todo el mundo? Mira, si no
le hubiera dicho a esa serpiente que no atacara a Justin...
—¿Eso es lo que le
dijiste?
—¿Qué pasa? Tú estabas
allí... Tú me oíste.
-Solo se escucho como un silbido…un siseo- explico Hermione
—Hablaste en lengua
pársel —le dijo Ron—, la lengua de las serpientes. Podías haber dicho cualquier
cosa. No te sorprenda que Justin se asustara, parecía como si estuvieras
incitando a la serpiente, o algo así. Fue escalofriante.
-Realmente escalofriante, y todo tiene un poco mas de
sentido al escuchar lo que dijiste- corrobo Ron
Harry se quedó con la
boca abierta.
—¿Hablé en otra
lengua? Pero no comprendo... ¿Cómo puedo hablar en una lengua sin saber que la
conozco?
-Eso es lo que no entiendo- dijo Dorcas
Ron negó con la
cabeza. Por la cara que ponían tanto él como Hermione, parecía como si acabara
de morir alguien. Harry no alcanzaba a comprender qué era tan terrible.
-Slytherin hablaba parsel- explico Remus a los mas pequeños
que escuchaban confundidos
—¿Me quieres decir
qué hay de malo en impedir que una serpiente grande y asquerosa arranque a
Justin la cabeza de un mordisco? —preguntó—. ¿Qué importa cómo lo hice si evité que Justin
tuviera que ingresar en el Club de Cazadores Sin Cabeza?
Algunos no pudieron
evitar pequeñas sonrisas
-Harry tiene razón- apoyo Dorcas
—Sí importa —dijo
Hermione, hablando por fin, en un susurro—, porque Salazar Slytherin era famoso
por su capacidad de hablar con las serpientes. Por eso el símbolo de la casa de
Slytherin es una serpiente.
-Realmente se supone que los Slytherin se diferencian por la
astucia, debería ser algo asi como un zorro- comento Marlene
-Tienen una serpiente porque todos los Slytherin tienen
sangre fría- dijo Sirius despectivamente
Harry se quedó
boquiabierto.
—Exactamente —dijo
Ron—. Y ahora todo el colegio va a pensar que tú eres su
tatara-tatara-tatara-tataranieto o algo así.
-Los potters no somos descendientes de ningun Slytherin-
dijo James ofendido- somos sangre pura por lo tanto nuestro árbol genealógico es
fácil de armar- explico
-Si, ademas la línea familiar de Slytherin murió con los
Gaunt- agrego Sirius- en los libros que me hacia leer Walburga, decía que la
sangre de Slytherin ya estaba extinta
—Pero no lo soy —dijo
Harry, sintiendo un inexplicable terror.
—Te costará mucho
demostrarlo —dijo Hermione—. Él vivió hace unos mil años, así que bien podrías
serlo.
-¡No lo somos!- dijeron James y Harry al mismo tiempo
Aquella noche, Harry
pasó varias horas despierto. Por una abertura en las colgaduras de su cama,
veía que la nieve comenzaba a amontonarse al otro lado de la ventana de la
torre, y editaba. ¿Era posible que fuera un descendiente de Salazar Slytherin?
-No lo es- repitió James
Al fin y al cabo, no
sabía nada sobre la familia de su padre.
-No digas sobre mi familia- pidio James- son tu familia, por
mas que no los conocerías, los potter son tu familia, soy tu familia…somos tu
familia- Lily sonrio enternecida
Los Dursley nunca le
habían permitido hacerles preguntas sobre sus familiares magos.
-Tampoco sabrían mucho que decirte- dijo Lily
En voz baja, trató de
decir algo en lengua pársel, pero no encontró las palabras. Parecía que era
requisito imprescindible estar delante de una serpiente.
-No- dijo Remus- simplemente eras un principiante
«Pero estoy en
Gryffindor —pensó Harry— El Sombrero Seleccionador no me habría puesto en esta
casa si tuviera sangre de Slytherin...»
-Eso es cachorro- felicitaron James y Sirius
«¡Ah! —dijo en su
cerebro una voz horrible—, pero el Sombrero Seleccionador te quería enviar a
Slytherin, ¿lo recuerdas?»
-Harry aunque quisieras estar en Slyhterin, jamás encajarías
eres demasiado dulce y buena persona como para ser un Slytherin- dijo con una
sonrisa Ginny
-Ginny tiene razón…no se si lo de dulce, pero si lo de buena
persona- secundo Neville, sacándole una sonrisa a todos
Harry se volvió. Al
día siguiente vería a Justin en clase de Herbología y le explicaría que le
había pedido a la serpiente que se apartara de él, no que lo atacara, algo
(pensó enfadado, dando puñetazos a la almohada) de lo que cualquier idiota se
habría dado cuenta.
-La verdad que si es bastante obvio- dijo Bill
A la mañana
siguiente, sin embargo, la nevada que había empezado a caer por la noche se
había transformado en una tormenta de nieve tan recia que se suspendió la
última clase de Herbología del trimestre.
-¿Cuándo yo entre a Hogwarts también se van a cancelar mis
clases?- pregunto Tonks entusiasmada
-Claro que lo harán pequeña, lo harán- dijo Sirius acariciándole
la cabeza como si fuera un perrito
La profesora Sprout quiso
tapar las mandrágoras con pañuelos y calcetines, una operación delicada que no
habría confiado a nadie más, puesto que el crecimiento de las mandrágoras se
había convertido en algo tan importante para revivir a la Señora Norris y a
Colin Creevey.
Una sombra se extendió por el gran comedor al recordar los
ataques
Harry le daba vueltas
a aquello, sentado junto a la chimenea, en la sala común de Gryffindor,
mientras Ron y Hermione aprovechaban el hueco dejado por la clase de Herbología
para…
Fred carraspeo haciendo reir a todos
echar una partida al
ajedrez mágico.
-Ahora también juegan al ajedrez en los ratos libres,
¿verdad Ronnie?- dijo George divertido
-si claro- respondió el pelirrojo
-Escuchaste Fabian, ahora le llaman ajedrez
-como han cambiado los tiempos Gideon- todos rieron
—¡Por Dios, Harry!
—dijo Hermione, exasperada, mientras uno de los alfiles de Ron tiraba al suelo
al caballero de uno de sus caballos y lo sacaba a rastras del tablero
-Una de las pocas cosas en que alguien supera a Hermione-
comento Ginny
—. Si es tan
importante para ti, ve a buscar a Justin.
De forma que Harry se
levantó y salió por el retrato, preguntándose dónde estaría Justin.
-¿Por qué te importa tanto lo que diga ese imbesil?-
pregunto Sirius
-Tal vez mi hijo no viva en una burbuja como tu Sirius- dijo
Lily
El castillo estaba
más oscuro de lo normal en pleno día, a causa de la nieve espesa y gris que se
arremolinaba en todas las ventanas. Tiritando,
-pobrecito- dijeron Lily, Ginny y Molly haciendo sonrojar a
Harry
Harry pasó por las
aulas en que estaban haciendo clase, vislumbrando algunas escenas de lo que
ocurría dentro. La profesora McGonagall gritaba a un alumno que, a juzgar por
lo que se oía, había convertido a su compañero en un tejón.
Todos rieron y la profesora frunció el ceño
Aguantándose las
ganas de echar un vistazo,
-tipico de James- comento Remus
Harry siguió su camino, pensando que Justin
podría estar aprovechando su hora libre para hacer alguna tarea pendiente, y
decidió mirar antes que nada en la biblioteca.
-Buena elección-dijo Arthur
Efectivamente,
algunos de los de Hufflepuff que tenían clase de Herbología estaban en la parte
de atrás de la biblioteca, pero no parecía que estudiasen.
Lily frunció el ceño imaginándose lo que vendria
Entre las largas
filas de estantes, Harry podía verlos con las cabezas casi pegadas unos a
otros, en lo que parecía una absorbente conversación. No podía distinguir si
entre ellos se encontraba Justin. Se les estaba acercando cuando consiguió
entender algo de lo que decían, y se detuvo a escuchar,
-Eso es de mala educación querido- regaño suavemente Molly
oculto tras la
sección de «Invisibilidad».
—Así que —decía un
muchacho corpulento— le dije a Justin que se ocultara en nuestro dormitorio. Quiero
decir que si Potter lo ha señalado como su próxima víctima,
-¡ESE HIJO DE…!
-¡Señor Potter!- lo corto Minerva- Sientese y guarde
silencio- James se sento de mala gana
es mejor que se deje ver poco durante una
temporada. Por supuesto, Justin se temía que algo así pudiera ocurrir desde que
se le escapó decirle a Potter que era de familia muggle. Lo que Justin le dijo
exactamente es que le habían reservado plaza en Eton. No es el mejor comentario
que se le puede hacer al heredero de Slytherin, ¿verdad?
-¡Yo solo he atacado a alguien para defenderme y que no me
matara!- dijo Harry molesto
-Tranquilo amor, todos saben que tu eres incapaz de hacer
algo asi- lo tranquilizo Ginny
—¿Entonces estás
convencido de que es Potter, Ernie? —preguntó asustada una chica rubia con coletas.
—Hannah —le dijo
solemnemente el chico robusto—, sabe hablar pársel.
-¿y?- dijo Fabian molesto- el chico habla parsel, llévenlo a
Azkaban por eso- ironizo
Todo el mundo sabe
que ésa es la marca de un mago tenebroso. ¿Sabes de alguien honrado que pueda
hablar con las serpientes? Al mismo Slytherin lo llamaban «lengua de
serpiente».
-Que tontería- bufo Bill
Esto provocó densos
murmullos. Ernie prosiguió:
—¿Recordáis lo que
apareció escrito en la pared? «Temed, enemigos del heredero.» Potter estaba
enemistado con Filch.
-No conozco a ningun alumno que no este enemistado con Filch-
dijo Fred dando a entender que esa razón era una completa ridiculez
A continuación, el
gato de Filch resulta agredido. Ese
chaval de primero, Creevey, molestó a Potter en el partido de quidditch,
sacándole fotos mientras estaba tendido en el barro.
-Colin era muy bueno,
pero en su primer año era realmente irritante- dijo Hermione
Y entonces aparece
Creevey petrificado.
—Pero —repuso Hannah,
vacilando— parece tan majo... y, bueno, fue él quien hizo desaparecer a
Quien-vosotros-sabéis. No puede ser tan malo, ¿no creéis?
-Me agrada esa chica- dijo Marlene
-es la novia de Neville- comento Ron como si nada
-Gracias por contarnos- dijo Alice “ofendida” su hijo rio
-hace tiempo que estamos juntos, cambio mucho después de la
guerra- conto algo sonrojado
Ernie bajó la voz
para adoptar un tono misterioso. Los de Hufflepuff se inclinaron y se juntaron
más unos a otros,
-oh por dios- bufo Narcissa
y Harry tuvo que acercarse más para oírlas palabras de Ernie.
—Nadie sabe cómo pudo
sobrevivir al ataque de Quien-vosotros-sabéis.
-¿Este imbesil esta insinuando que tu tienes algo que ver
con Voldemort?- dijo James asqueado
Quiero decir que era
tan sólo un niño cuando ocurrió, y tendría que haber saltado en pedazos.
Lily trago grueso ante la idea
Sólo un mago
tenebroso con mucho poder podría sobrevivir a una maldición como ésa.
-Nadie sobrevive a una maldición como esa por mas tenebroso
que sea, lo de Harry fue una excepción y ya sabremos porque- dijo Remus molesto
—Bajó la voz hasta
que no fue más que un susurro, y prosiguió—: Por eso seguramente es por lo que
Quien-vosotros-sabéis quería matarlo antes que a nadie. No quería tener a otro
Señor Tenebroso que le hiciera la competencia. Me pregunto qué otros poderes oculta
Potter.
-A mi se me ocurren uno que otro poder oculto que tienes, pero
no creo que Ernie se refiriera a eso- murmuro Ginny en su oído con picardia haciéndolo
sonreir
Harry no pudo
aguantar más y salió de detrás de la estantería, carraspeando sonoramente. De
no estar tan enojado,
-Carácter Evans a la vista- dijo James
le habría parecido divertida la forma en que
lo recibieron: todos parecían petrificados por su sola visión, y Ernie se puso
pálido.
-Esto será bueno- dijo Sirius con sorna y molestia
—Hola —dijo Harry—.
Busco a Justin Finch-Fletchley.
-mala forma de comenzar- comenzó Dorcas
Los peores temores de
los de Hufflepuff se vieron así confirmados. Todos miraron atemorizados a
Ernie.
—¿Para qué lo buscas?
—le preguntó Ernie, con voz trémula.
—Quería explicarle lo
que sucedió realmente con la serpiente en el club de duelo —dijo Harry.
-No iban a creerte- dijo Hermione
Ernie se mordió los
labios y luego, respirando hondo, dijo:
—Todos estábamos
allí. Vimos lo que sucedió.
—Entonces te darías
cuenta de que, después de lo que le dije, la serpiente retrocedió —le dijo
Harry.
—Yo sólo me di cuenta
—dijo Ernie tozudamente, aunque temblaba al hablar— de que hablaste en lengua
pársel y le echaste la serpiente a Justin.
-Bueno, igualmente, si el chico realmente pensaba que Harry
era el heredero es bastante respetable de su parte defender a su amigo- dijo
Alice
—¡Yo no se la eché!
—dijo Harry, con la voz temblorosa por el enojo—. ¡Ni siquiera lo tocó!
—Le anduvo muy cerca
—dijo Ernie—. Y por si te entran dudas —añadió apresuradamente—he de decirte que puedes
rastrear mis antepasados hasta nueve generaciones de brujas y brujos y no
encontrarás una gota de sangre muggle, así que...
-Le perdi todo el respeto- se corrigio Alice
—¡No me preocupa qué
tipo de sangre tengas! —dijo Harry con dureza— ¿Por qué tendría que atacar a
los de familia muggle?
—He oído que odias a
esos muggles con los que vives —dijo Ernie apresuradamente.
-¡Cualquiera en su sano juicio los odiaría!- dijo Andromeda
—No es posible vivir
con los Dursley sin odiarlos —dijo Harry—. Me gustaría que lo intentaras.
-Siempre he pensado que soy algo estúpidos…ya saben Justin,
Ernie..- comento Ron
Dio media vuelta y
salió de la biblioteca, provocando una mirada reprobatoria de la señora Pince,
que estaba sacando brillo a la cubierta dorada de un gran libro de hechizos.
Furioso como estaba, iba dando traspiés por el corredor, sin ser consciente de
adónde iba. Y al fin se dio de bruces contra una mole grande y dura que lo tiró
al suelo de espaldas.
-No me gusta que estes enfadado- dijo Ginny
-¿Cuánto hace que están juntos?- pregunto Lily
- siete años- dijo Harry- y nunca nos hemos peleado- agrego
acariciando las manos de Ginny y dándole un beso
-y desde que están juntos son un verdadero asco- agrego Ron
-¡Ron!- dijeron Ginny y Hermione
—¡Ah, hola, Hagrid!
—dijo Harry, levantando la vista.
Aunque llevaba la
cara completamente tapada por un pasamontañas de lana cubierto de nieve, no podía tratarse de nadie más que Hagrid,
pues ocupaba casi todo el ancho del corredor con su abrigo de piel de topo. En
una de sus grandes manos enguantadas llevaba un gallo muerto.
Ginny se estremeció
—¿Va todo bien,
Harry? —preguntó Hagrid, quitándose el pasamontañas para poder hablar—. ¿Por
qué no estás en clase?
—La han suspendido —contestó
Harry, levantándose—. ¿Y tú, qué haces aquí?
Hagrid levantó el
gallo sin vida.
Harry besaba el cuello de su pelirroja
-todo esta bien preciosa, no estes mal…le hace mal al
bebito-dijo acariciando el vientre
-tienes razón amor- ella respiro profundo y se acurruco en
el pecho de su ojiverde
—El segundo que matan
este trimestre —explicó—. O son zorros o chupasangres,
- ¿chupasangres?-
pregunto Tonks
-No te harán daño a ti- dijo Hermione- ademas Remus siempre podrá
defenderte- comento
-¿el/ yo porque?- preguntaron Sirius y Remus
-es que son como mejores amigos, ¿no lo han visto? Se llevan
de maravilla- comento inocentemente la castaña haciendo que Remus y Sirius
suspiraran aliviados
y necesito el permiso
del director para poner un encantamiento alrededor del gallinero. Miró a Harry
más de cerca por debajo de sus cejas espesas, cubiertas de nieve.
—¿Estás seguro de que
te encuentras bien? Pareces preocupado y alterado.
-Eres bueno para adivinar estados de animo Hagrid- felicito
Charlie
Harry no pudo repetir
lo que decían de él Ernie y el resto de los de Hufflepuff.
—No es nada —repuso—.
Mejor será que me vaya, Hagrid, después tengo Transformaciones y debo recoger
los libros.
-me sorprende lo buen chico que eres- dijo Marlene- si yo
estuviera en tu lugar hubiese despotricado contra ellos- Harry se encogió de
hombros y siguió jugueteando con las manos de Ginny
Se fue con la mente
cargada con todo lo que había dicho Ernie sobre él: «Justin se temía que algo así pudiera ocurrir
desde que se le escapó decirle a Potter que era de familia muggle...»
Todos fruncieron el ceño enfadados por lo que un chico como
Harry tenia que pasar
Harry subió las
escaleras y volvió por otro corredor. Estaba mucho más oscuro, porque el viento
fuerte y helado que penetraba por el cristal flojo de una ventana había apagado las antorchas. Iba por
la mitad del corredor cuando tropezó y cayó de cabeza contra algo que había en
el suelo.
-¿Qué ocurrió esta vez?- bufo Lily- realmente tienes la mala
suerte de James
Se volvió y afinó la
vista para ver qué era aquello sobre lo que había caído, y sintió que el mundo
le venía encima.
Remus frunció el ceño, ya se imaginaba lo que vendría.
Sobre el suelo,
rígido y frío, con una mirada de horror en el rostro y los ojos en blanco vueltos hacia el techo, yacía Justin
Finch-Fletchley.
-Mierda- bufo Sirius
-Eso traerá muchos problemas- dijo Bill
Y eso no era todo. A
su lado había otra figura, componiendo la visión más extraña que Harry hubiera contemplado nunca.
-¿Qué?- pregunto Dorcas
Se trataba de Nick
Casi Decapitado, que no era ya transparente ni de color blanco perlado, sino
negro y neblinoso, y flotaba inmóvil, en posición horizontal, a un palmo del
suelo. La cabeza estaba medio colgando, y en la cara tenía una expresión de
horror idéntica a la de Justin.
-¿es posible matar a un fantasma?- pregunto Tonks
-No Nymphadora, no hay forma de matar de lo muerto-dijo
Andromeda
Harry se puso de pie,
con la respiración acelerada y el corazón ejecutando contra sus costillas lo
que parecía un redoble de tambor.
-Cualquiera estaría asi- murmuro Astoria por lo bajo
Miró enloquecido arriba
y abajo del corredor desierto y vio una hilera de arañas huyendo de los cuerpos a todo correr.
-¿arañas?- se pregunto a si mismo Alastor
Lo único que se oía eran las voces
amortiguadas de los profesores que daban clase a ambos lados. Podía salir corriendo, y nadie se enteraría
de que había estado allí.
-¿Qué esperas para hacerlo?- pregunto un Ravenclaw
Pero no podía
dejarlos de aquella manera..., tenía que hacer algo por ellos.
-era obvio que no los dejarías- comento Percy
¿Habría alguien que creyera que él no había
tenido nada que ver?
-dadas las circunstancias no- dijo George
Aún estaba allí,
aterrorizado, cuando se abrió de golpe la puerta que tenía a su derecha. Peeves
el poltergeist surgió de ella a toda velocidad.
-Esto esta empeorando- dijo molesto Fabian
—¡Vaya, si es Potter
pipí en el pote! —cacareó Peeves, ladeándole las gafas de un golpe al pasar a su lado dando
saltos—. ¿Qué trama Potter? ¿Por qué acecha?
Varios gruñeron, lo que faltaba.
Peeves se detuvo a
media voltereta. Boca abajo, vio a Justin y Nick Casi Decapitado. Cayó de pie,
llenó los pulmones y, antes de que Harry pudiera impedirlo, gritó:
—¡AGRESIÓN!
¡AGRESIÓN! ¡OTRA AGRESIÓN! NINGUN MORTAL NI FANTASMA ESTÁ A SALVO! SALVESE
QUIEN PUEDA! AGREESIÓÓÓÓN!
- Maldita sea- bufo Lily
Pataplún, patapán,
pataplún: una puerta tras otra, se fueron abriendo todas las que había en el
corredor, y la gente empezó a salir. Durante varios minutos, hubo tal jaleo que por poco no aplastan a
Justin y atraviesan el cuerpo de Nick Casi Decapitado.
-voy a terminar por golpear a bastante gente- bufo Sirius
furioso
Los alumnos
acorralaron a Harry contra la pared hasta que los profesores pidieron calma. La
profesora McGonagall llegó corriendo, seguida por sus alumnos, uno de los
cuales aún tenía el pelo a rayas blancas y negras.
En otras condiciones hubiesen reido, pero el humor estaba
demasiado tenso como para reir
La profesora utilizó
la varita mágica para provocar una sonora explosión que restaurase el silencio
y ordenó a todos que volvieran a las aulas. Cuando el lugar se hubo despejado
un poco, llegó corriendo Ernie, el de Hufflepuff.
-Genial- Lily estaba furiosa
—¡Te han cogido con
las manos en la masa! —gritó Ernie, con la cara completamente blanca, señalando
con el dedo a Harry.
-Este imbesil se esta ganando que le patiemos el trasero-
gruño Gideon
—¡Ya vale, Macmillan!
—dijo con severidad la profesora McGonagall.
Todos asintieron de acuerdo con la profesora
Peeves se meneaba por
encima del grupo con una malvada sonrisa, escrutando la escena; le encantaba el
follón. Mientras los profesores se inclinaban sobre Justin y Nick Casi
Decapitado, examinándolos, Peeves rompió a cantar:
—¡Oh, Potter, eres un
zote, estás podrido, te cargas a los estudiantes, y te parece divertido!
-¡VOY A ESTRANGULAR A PEEVES!- grito Lily furiosa
-Creeme que yo te ayudo- agrego Ginny molesta
-todo esto ya paso- las tranquilizo Harry
—¡Ya basta, Peeves!
—gritó la profesora McGonagall, y Peeves escapó por el corredor, acándole la lengua a Harry.
-estupido- murmuro Ron
Los profesores
Flitwick y Sinistra, del departamento de Astronomía, fueron los encargados de
llevar a Justin a la enfermería, pero nadie parecía saber qué hacer con Nick
Casi Decapitado.
-No me sorprende- murmuro Dorcas
Al final, la
profesora McGonagall hizo aparecer de la nada un gran abanico, y se lo dio a
Ernie con instrucciones de subir a Nick
Casi Decapitado por las escaleras.
-Imaginativo Minerva- felicito Albus por lo bajo
Ernie obedeció,
abanicando a Nick por el corredor para llevárselo por el aire como si se
tratara de un aerodeslizador silencioso y negro. De esa forma, Harry y la
profesora McGonagall se quedaron a solas.
-¿Usted no cree que Harry sea el culpable verdad?- pregunto
James
-Claro que no señor Potter
—Por aquí, Potter
—indicó ella.
—Profesora —le dijo
Harry enseguida—, le juro que yo no...
—Eso se escapa de mi
competencia, Potter —dijo de manera cortante la profesora McGonagall.
-Deberia ayudarlo un poco- dijo Lily molesta
Caminaron en
silencio, doblaron una esquina, y ella se paró ante una gárgola de piedra
grande y extremadamente fea.
—¡Sorbete de limón!
—dijo la profesora.
-¿melancolia Fred?- pregunto George
-Melancolia George- corrobo el
Se trataba,
evidentemente, de una contraseña, porque de repente la gárgola revivió y se
hizo a un lado, al tiempo que la pared que había detrás se abría en dos. Incluso aterrorizado como estaba
por lo que le esperaba, Harry no pudo dejar de sorprenderse.
Ginny sonrio imaginándose al pequeño Harry, y sonrio aun mas
al pensar que tendría la oportunidad de verlo porque el pequeño Albus era la
copia de su papa
-¿Por qué sonrie?- pregunto Percy confundido
-Esta pensando en nuestros hijos- dijo Harry- ¿verdad
bonita?- ella asintió
-¿Cómo sabes?- pregunto Fabian confundido
-conozco esa mirada- la beso en el hombro con cariño,
mientras las mujeres sonreían enternecidas y los hombres sorprendidos
Detrás del muro había
una escalera de caracol que subía lentamente hacia arriba, como si fuera
mecánica. Al subirse él y la profesora McGonagall, la pared volvió a cerrarse tras
ellos con un golpe sordo.
-Ese momento en que sabes que estas en problemas- dijo
Sirius con un suspiro
-es maravilloso- concluyo James
Subieron más y más
dando vueltas, hasta que al fin, ligeramente mareado, Harry vio ante él una reluciente puerta de
roble, con una aldaba de bronce en forma de grifo, el animal mitológico con
cuerpo de león y cabeza de águila.
Los mas pequeños escuchaban entusiasmados
Entonces supo adónde lo llevaba. Aquello debía
de ser la vivienda de Dumbledore.
-Capitulo terminado- anuncio Remus
-Bueno, comeremos y seguiremos con la lectura- anuncio
Albus.
Nota de autora: Lose, me merezco mil crucios. Pero un familiar estuvo internado, estuve en el hospital quedandome, tengo otros fics, la pagina, un roleplay, 2 tumblr, la escuela, la casa, la vida real, cocino, limpio, estoy MUY estresada y les juro que hago lo que puedo, estoy durmiendo 4 horas por noche si llego a dormirlas.
Muy buen capitulo... espero que puedas continuar pronto.
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarY yo me acabo de enterar que actualizaste, me indigno.
Me encantoo!! Enserio, me gusta mucho, yo me reia sola, me encanta es historia, yo la mia la tengo SUPER abandonada, hoy voy a intentar hacer algo!
Besos Kamii
tardas mucho jajja bueno espero que el próximo sea mas rápido esta super bien besos
ResponderEliminarHoola, me he leido absolutamente TODO en día y medio xd me preguntaba si ibas a seguir o si ya está abandonado (por curiosidad, no es la primera vez que espero meses a que se actualice algo y nunca ocurre)
ResponderEliminarMe encanta los comentarios de los de esa época, y me muero por ver que dicen en el prisionero de Azkabam.
PD: en mi opinión Siri tiene razón, los Potter son muy melosos xd
Yo no entiendo en capitulos anteriores george venia del mismo tiempo que harry y hablaba de su esposa pero ahora dices que vienen de 20 años eso es confuso
ResponderEliminarSeria genial que aparezcan los niños de Harry y griten y abrasen a sus abuelos, y aunque ya aya pasado, tomate todo con calma, te lo digo por experiencia, a veces la gente debe comprender las prioridades de uno, si?
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